PEDRO BANDERA PELÁEZ

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viernes, 12 de septiembre de 2008

LA LEGION Y SU CRISTO DE LA BUENA MUERTE


Queridos Lectores:
Hace unas dos semanas, pude ver en un programa de TV -dedicado a mostrar las miserias que hay en la calle -, como de forma aleatoria entrevistaban a unos "indigentes" de un comedor social en Leganés. Entre ellos, figuraba una persona jóven de unos 43/44 años, que me llamó mucho la atención, pues mediaba en un altercado que mantenían otros dos danmificados, -uno de ellos de raza negra -. Éste jóven en cuestión, gritaba algo como ..... no te atevas de ponerle la mano a un compañero mío.


La sangre no llegó al rio, pero el periodista curioso por esa actitud quiso profundizar un poco más en la personalidad de este hombre en concreto y le pidió si podría mostrar a cámara el lugar donde vive, cosa que hizo. Cuando llegó a su "hogar", en un polígono de la mencionada ciudad madrileña, el periodísta pudo mostrar que éste hombre sobrevivía en un -podríamos decir agujero -, de unos siete metros cuadrados. Las paredes de lata y el techo del mismo material, no creo que soportaran las inclemencias del tiempo, pero es lo que tenía. Eso sí, junto a los cartones que le servían de mullida cama, se podía observar un jarrón con unas flores de plástico que llamaban enormemente la atención en aquella austera y sombría decoración, por lo que el periodista tuvo forzosamente que preguntar. Los ojos se le humedecieron y con una voz rota por la emoción le dijo que eran flores que le ponía al Cristo de la Buena Muerte para que le protegiera de cualquier peligro que pudiera acecharle por la noche, ya que en cualquier momento su vida podría terminar. Fue Legionario una vez y desde entonces no se separa de su Cristo, de su Cristo protector de él y de La Legión.


Juzguen Vdes. esta historia, y crean que sólo se trata de un ejemplo real, existen muchos Ex-Legionarios que en un momento de sus vidas lo dieron todo y ahora se encuentran en la más absoluta de las soledades y miserias a la que jamás debería enfrentarse un ser humano.


Esto justifica la Fundación, así lo creo.
Un saludo,
Pedro Bandera
Secretario.

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